Entre la riqueza emocional que heredamos, están las tradiciones y expresiones vivas heredadas de nuestros antepasados y que transmitimos a nuestros descendientes.
Como homenaje a esa herencia o patrimonio inmaterial, queremos destacar a nuestros abuelos y abuelas, agradecer el rol que ellos tuvieron al transmitirnos con amor, tradiciones, juegos, recetas de cocina, tejidos, oraciones, cuentos, trabalenguas y tantos otros saberes que forman parte de nuestra identidad.
Para festejar esa riqueza heredada, les compartimos el cuento Lluvia de Abuelas de Adriana Keselman, narrado por Julia Vilche.